Las ansias imperiales de Vladimir Putin han quedado de nuevo sobre la mesa este viernes cuando la OTAN ha lanzado un amago de invitación a Finlandia y Suecia a que abandonen su neutralidad y se integren en la organización atlántica de defensa. La portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia ha respondido inmediatamente con una amenaza: «Posibles consecuencias militares y políticas» a Finlandia y Suecia si deciden entrar en la OTAN.
El señor señuelo en el título.
Igualmente, entiendo que cederán a su chantaje porque Europa son unos demócratas pusilánimes, pero si de mí dependiese, Finlandia y Suecia se unen a la Otan e invadimos y recuperamos hasta la península de Crimea.
Conste que hasta ahora, en el tema de Ucrania he sido bastante pro-ruso.