Beber agua
La cantidad diaria recomendada de agua va de un litro y medio a dos. Elige aguas aromatizadas o con limón si te cuesta beber estos 6 u 8 vasos diarios.
Continuamente se nos recomienda beber agua para limpiar nuestro organismo y mantener una buena salud.
Sin embargo, ¿sabemos cómo hacerlo?
La cantidad es importante, pero también la manera de hacerlo y los momentos más adecuados del día.
En este artículo te explicamos cuál es la manera más beneficiosa de beber agua y cómo te ayudará en unas u otras dolencias.
La importancia del agua
El agua forma parte de todos los fluidos de nuestro cuerpo (orina, sudor, heces, jugos digestivos, saliva, lágrimas, etc.), pero, además, es necesaria para que las células de nuestro organismo funcionen con normalidad y para evitar la deshidratación, tal y como afirma este estudio realizado por la Sociedad Española de Nutrición Básica y Aplicada.
Además debemos saber que el agua no sólo la obtenemos bebiéndola. También lo hacemos a través de todos los alimentos que la contienen, especialmente las frutas y las verduras.
¿Qué tipo de agua?
Si el agua del grifo es de buena calidad (de Madrid), esa será siempre la opción más saludable, económica y ecológica. Pero debemos asegurarnos que la calidad del agua en su origen y tras el paso por las tuberías llega en buen estado.
El agua embotellada es otra alternativa, siempre y cuando también sea de calidad.
Finalmente, tenemos los filtros y las jarras osmóticas como alternativa.
El agua no debería tener ningún sabor ni olor especial.
¿Qué cantidad?
En general, se recomienda beber entre un litro y medio y dos litros diarios, es decir, entre 6 y 8 vasos. Con estos consejos que te ofrecemos a continuación verás como no es tan difícil.
Sin embargo, también hay que tener en cuenta cada situación. No es lo mismo en invierno que en verano, si hacemos ejercicio físico o una vida más sedentaria, etc. Así lo afirma este estudio realizado por el Hospital Universitario de Canarias (España).
Puedes empezar a aumentar la cantidad de manera gradual. Por ejemplo, empieza bebiendo medio vaso más cada dos o tres días, y así hasta llegar a los 8.
Mientras lo hagas irás viendo cambios en tu salud. Posiblemente tendrás más energía, mejorará el estado de tu piel y sudarás más. Es decir, ayudarás a que tu cuerpo elimine mejor las toxinas.
En ayunas
Se cree que el mejor momento del día para beber agua es en ayunas. Suele decirse que podemos beber hasta cuatro vasos de agua un buen rato antes de desayunar, siempre y cuando lo hagamos lentamente y sin que sea un sacrificio.
No obstante, no existen evidencias científicas que avalen dicha afirmación.
Antes de las comidas
Si queremos evitar comer demasiada cantidad o demasiado rápido, beber un vaso de agua unos quince minutos antes de la comida es un consejo muy efectivo para reducir la ansiedad.
Evitarla con las comidas
El momento más perjudicial para proponernos beber una gran cantidad de agua posiblemente es justo en la comida. Se cree que se nos mezclará con los alimentos y los jugos gástricos y empeorará nuestra digestión.
Si la comida es bastante sabrosa posiblemente tendremos necesidad de beber un poco de agua. Si nos acostumbramos a beberla antes, e incluimos alimentos frescos en la comida (ensalada, gazpacho, etc.) también tendremos menos necesidad de beber mientras comamos.
Por la noche
El único impedimento de beber agua por la noche es que nos obligará a levantarnos a media noche para ir al baño y empeoremos así nuestro descanso.
Tips para beber más agua
La cantidad diaria recomendada de agua va de un litro y medio a dos. Elige aguas aromatizadas o con limón si te cuesta beber estos 6 u 8 vasos diarios.
Continuamente se nos recomienda beber agua para limpiar nuestro organismo y mantener una buena salud.
Sin embargo, ¿sabemos cómo hacerlo?
La cantidad es importante, pero también la manera de hacerlo y los momentos más adecuados del día.
En este artículo te explicamos cuál es la manera más beneficiosa de beber agua y cómo te ayudará en unas u otras dolencias.
La importancia del agua
El agua forma parte de todos los fluidos de nuestro cuerpo (orina, sudor, heces, jugos digestivos, saliva, lágrimas, etc.), pero, además, es necesaria para que las células de nuestro organismo funcionen con normalidad y para evitar la deshidratación, tal y como afirma este estudio realizado por la Sociedad Española de Nutrición Básica y Aplicada.
Además debemos saber que el agua no sólo la obtenemos bebiéndola. También lo hacemos a través de todos los alimentos que la contienen, especialmente las frutas y las verduras.
¿Qué tipo de agua?
Si el agua del grifo es de buena calidad (de Madrid), esa será siempre la opción más saludable, económica y ecológica. Pero debemos asegurarnos que la calidad del agua en su origen y tras el paso por las tuberías llega en buen estado.
El agua embotellada es otra alternativa, siempre y cuando también sea de calidad.
Finalmente, tenemos los filtros y las jarras osmóticas como alternativa.
El agua no debería tener ningún sabor ni olor especial.
¿Qué cantidad?
En general, se recomienda beber entre un litro y medio y dos litros diarios, es decir, entre 6 y 8 vasos. Con estos consejos que te ofrecemos a continuación verás como no es tan difícil.
Sin embargo, también hay que tener en cuenta cada situación. No es lo mismo en invierno que en verano, si hacemos ejercicio físico o una vida más sedentaria, etc. Así lo afirma este estudio realizado por el Hospital Universitario de Canarias (España).
Puedes empezar a aumentar la cantidad de manera gradual. Por ejemplo, empieza bebiendo medio vaso más cada dos o tres días, y así hasta llegar a los 8.
Mientras lo hagas irás viendo cambios en tu salud. Posiblemente tendrás más energía, mejorará el estado de tu piel y sudarás más. Es decir, ayudarás a que tu cuerpo elimine mejor las toxinas.
En ayunas
Se cree que el mejor momento del día para beber agua es en ayunas. Suele decirse que podemos beber hasta cuatro vasos de agua un buen rato antes de desayunar, siempre y cuando lo hagamos lentamente y sin que sea un sacrificio.
No obstante, no existen evidencias científicas que avalen dicha afirmación.
Antes de las comidas
Si queremos evitar comer demasiada cantidad o demasiado rápido, beber un vaso de agua unos quince minutos antes de la comida es un consejo muy efectivo para reducir la ansiedad.
Evitarla con las comidas
El momento más perjudicial para proponernos beber una gran cantidad de agua posiblemente es justo en la comida. Se cree que se nos mezclará con los alimentos y los jugos gástricos y empeorará nuestra digestión.
Si la comida es bastante sabrosa posiblemente tendremos necesidad de beber un poco de agua. Si nos acostumbramos a beberla antes, e incluimos alimentos frescos en la comida (ensalada, gazpacho, etc.) también tendremos menos necesidad de beber mientras comamos.
Por la noche
El único impedimento de beber agua por la noche es que nos obligará a levantarnos a media noche para ir al baño y empeoremos así nuestro descanso.
Tips para beber más agua
- Descubre las deliciosas y originales aguas aromatizadas con flores, frutas y plantas frescas.
- Prepárate infusiones de plantas medicinales.
- Elabora una limonada casera con agua, jugo de limón, menta fresca y estevia.
- Lleva siempre contigo una botella de agua. Cuando estés en casa acostúmbrate siempre a tenerla en la habitación donde estés.
, muchas gracias por la info nunca está de más indagar en un hábito que aunque nos parezca obvio hay mucho más transfondo que muchos no conocemos.